jueves, 12 de julio de 2007

CERAMICA CONTEMPORANEA

Valorando los legados de las diferentes culturas volvemos los ojos al pensamiento griego donde Aristóteles distingue las artes útiles que modifican las cosas para conseguir un provecho y para satisfacer una necesidad material; de las artes bellas que pretenden procurar placer estético y llenar exigencias espirituales.


Lo bello suponía una magnitud adecuada tanto ética como estética.
Según Platón se debía unir lo bello y lo bueno y lo moralmente bello y bueno es perfecto y da sentido a la vida en todos los campos de la conducta y el saber, la belleza interior y la búsqueda del conocimiento.
Las representaciones artísticas despiertan en el hombre sentimientos éticos de valor positivo o negativo. Una obra de arte se hace viva y es disfrutada porque está cargada de fuerza mágica, significación sagrada, identidad representativa y valor simbólico.




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